Pareciendo oírte hablar del dulce cansancio
Del placer cumplido desde ignoto lugar
Apagué la lámpara y llegó de lo lejos un olor
A incienso que me vino a incendiar
Tú que te has perdido para al fin encontrarte
Y hay señales de humo desde algún callejón
Sólo sé que existas donde existas excitas
Y eres tú la reina y lo demás qué se yooo
Si alguien osa perseguir, perseguirte cual alfil
Que proteja un jaque mate
Que proteja un jaque mate al infeliz
Dicen que es un campo de batalla la mente
Y de muy dementes el desearla tomar
La locura atrapa con sus gatos guardianes
Al ladrón que intenta profanar más allá
No me queda duda que tu cuerpo es un templo
No me queda duda que al entrar siento a dios
Dicho de otro modo si el altar es la cama
Eres la deidad y la ofrenda soy yo
No, a nadie quiero convencer
Convencer de lo que sé
Que predique el inseguro
Que predique el inseguro de su fe
No me queda duda que tu cuerpo es un templo
No me queda duda que al entrar siento a dios
Dicho de otro modo si el altar es la cama
Eres la deidad y la ofrenda soy yo
No, a nadie quiero convencer
Convencer de lo que sé
Que predique el inseguro
Que predique el inseguro de su fe
No, a nadie quiero convencer
Convencer de lo que sé
Que predique el inseguro
Que predique el inseguro de su fe
No, no no, a nadie quiero convencer
Convencer de lo que sé
Que predique el inseguro
Que predique el inseguro de su fe
No, a nadie quiero convencer
Convencer de lo que sé
Que predique el inseguro
Que predique el inseguro de su fe