Queremos que estés aquí Jesús
No ser como el mesonero de Belén
Ni ser como aquellos sabios creyendo tener tu ley
Pero ciegos sin ver que aquel niño de doce años, era el rey

Queremos que estés aquí Jesús
No ser como aquellos otros de Nazaret
Que habiéndote conocido no te podían admitir
Como tú bien dijiste, ningún profeta es querido, en su país

Y no seria justo hablar juzgando su actitud
Pues no somos nosotros hoy mejores
La sola diferencia es que sus ojos estaban vendados
Y tú, en tu infinito amor te nos has revelado

Y es por eso que hoy te recordamos con amor
Pues ya hubo contra ti bastante odio
Que ya hubo mucha gente que te oyó y te rechazó
Cerrando los oídos a tu voz

Quizá puedas recordar, señor
Haber sentido el rechazo con dolor
Quizá en algún fariseo o interprete de la ley
O algún que otro joven rico que amaba el dinero, más que a ti

Quizá puedas recordar también
A un grupo de pescadores, hombres de bien
Algunas mujeres buenas, algún nicodemo, también
Y hasta algún José de arimatea algo tardío, pero fiel

Si acaso hoy después de dos mil años otra vez
Mirándonos a solas te preguntes
¿Por cuántos he sufrido, por cuantos me he entregado?
¿Acaso me recuerdan o quizá me han olvidado?

Que seas hoy consciente del cariño y del amor
Que sigue profesándote tu pueblo
Pues ya que recibiste odio a cambio de tu amor
Que sepas que te amamos oh señor

Que sepas que en el siglo xx aún hay juventud
Que busca tus caminos y que te ama
Y clama como aquellos del camino de emaús
Queremos que estés aquí Jesús

Composição: John McLaughlin / Pablo Milanés